El consumidor puede ejercer su derecho a desistir de una suscripción de pago una sola vez
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea resuelve una cuestión prejudicial acerca de un caso surgido a partir del caso C-565/22, que involucra la solicitud de cancelación de una suscripción a un servicio en línea.
En el caso en cuestión, la compañía proporciona una plataforma de educación en línea para estudiantes, permitiendo a sus usuarios acceder gratuitamente a sus servicios durante un período de treinta días. A pesar de que la suscripción puede ser cancelada en cualquier momento durante este plazo, una vez concluido, se convierte en una suscripción de pago que se renueva automáticamente. Antes de ello, la empresa informa a sus usuarios acerca de su derecho de desistimiento.
Sobre el periodo de prueba sin coste
Actualmente, diversas plataformas en línea brindan la opción de probar sus servicios durante un periodo determinado, informando que al finalizar, el cliente deberá abonar la suscripción. No obstante, en muchas ocasiones el cliente no recibe una notificación al término del período de prueba, lo que implica que, de no cancelar el servicio, se le facturará el importe correspondiente a una suscripción regular.
Recientemente, una organización austríaca de protección al consumidor cuestionó la validez de la transformación de una suscripción gratuita a una suscripción de pago y de su renovación automática. El órgano competente en el caso solicitó al TJUE una interpretación de la Directiva sobre los derechos de los consumidores en esta situación.
Los derechos de los consumidores aplicados al caso
El TJUE interpretó el artículo 9, apartado 1, de la Directiva 2011/83/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 25 de octubre de 2011, sobre los derechos de los consumidores. Dicha normativa establece que, salvo algunas excepciones, el consumidor dispone de un plazo de 14 días para retractarse de un contrato a distancia o celebrado fuera del establecimiento, sin necesidad de justificar su decisión y sin incurrir en costes adicionales.
Aplicando esta premisa a las plataformas digitales con período de prueba gratuito, el consumidor sólo puede desistir del contrato (sin costo alguno) durante dicho periodo. Si el consumidor no cancela el servicio antes de que finalice la prueba, la suscripción se prorrogará automáticamente. No obstante, si la empresa no ha informado de forma clara, comprensible y explícita al consumidor sobre la conversión a suscripción de pago después del período inicial gratuito, el consumidor tiene derecho a desistir nuevamente.